CARLOS GARDEL

UNO
se acuerda de los viejos tangos de Gardel
de flor y flor el tolosino y francés,
Zorzal nacido en la oriental república
y en tres lugares a la vez.
Girondo, Cortázar,

Benedetti y vos.

en la vitrola te escucho zorzal
y en tus lágrimas de polvo
me repugna tu sepulcro
el tranvía y la virola
No sé si te lo han dicho;
cantás mejor.

Compatriotas, este cantor definitivo
vagó por el Abasto de un país prestado
para sus propios dueños trasandinos
y con el amigo Razanno que tenía peor voz
payando en cafetines
terminaron empatados.

y aunque parezca más leyenda
que su barrial de infancia
se estiraron hasta diez bises
los cantores con vaselina
en la noche de París y de las mises.

Y juro que no miento

el chamullo ni engrupimiento

No sé si te lo han dicho
pero cantás mejor.

Entre la vieja querida y la perdida
le preguntaron:  ¿Y vos?
¿Cuándo te vas a casar
si le tenés tanto miedo
a la soledad, zorzal?
Pero no respondió
el tenor abaritonado.

El día en que me quieras
dirás que es mi verso
y le aterra por las noches
la estrofa de Amado Nervo.
En Medellín se requemaron
todos los tapados
Incluso esa lombriz
que le guardó el secreto.

La noche en que la higuera florece
vive el 24 de Junio,
y es mi noche triste
la que estremece.
No sé si te lo han dicho,
mientras pasa el tiempo,
creo que cantás mejor.

Entre gomina, silbo y cantar
distingo engaño del percal.
¡Pero cuándo te van a enterrar
en tus propios huesos!
que son los argentinos huesos
de tu oropel y del barrial.

Pierdo el ritmo, estilo
y repicando la ira
me atraganta el verso.
Tu muerte paga con sus mundos
y con sus tiros en la nuca
me van rememorando

A diestra y siniestra
te hicieron mercancía Carlos
y te usan de bandera,
los otros y los amargos.

No sé si te lo han dicho zorzal,
ya no sé como cantás
Solo sé que los otros,
creen que cantan de verdad.